Golpe a golpe y hoyo a hoyo
“El golf es mi religión… me ayuda a entender, comprender, serenarme y actuar”
A todos los golfistas nos suena esta expresión tan recurrente, utilizada y repetida por aficionados, profesionales, entrenadores, reporteros, etc… Y es que la expresión no tiene desperdicio y es aplicable – al menos para mí – a todas las facetas de la vida diaria. El concepto que transmite es bien parecido a la moraleja del cuento de la lechera. Fabula que ha dado pie a una expresión más que popular y que usamos cuando alguien imagina o sueña algo que se encuentra lejano y que previamente hay que ir cumpliendo pequeños objetivos hasta alcanzar el sueño, significado similar al de la expresión “hacer castillos en el aire” (hacerse ilusiones). Pues la tan sencilla frase de golf “golpe a golpe y hoyo a hoyo” se traduce para mí en ni más ni menos que en una filosofía de vida.
Por recurrente que sea no deja de tener un valor brutal. Tanto en golf como en otras facetas de nuestra vida intentamos imaginar, visualizar el objetivo – que está muy bien – pero finalmente el único camino para llegar a ese objetivo visualizado es ir dando golpe a golpe.
En el camino hacia la consecución del objetivo – ya sea un objetivo personal, profesional o el hoyo 8 – suele estar lleno de obstáculos, rodeado de inclemencias de todo tipo y a pesar de poder recibir ayuda y consejos de nuestros caddies, familiares y amigos la decisión del palo a utilizar es nuestra, solo nuestra.
Es frecuente (y de nada sirve) hacer castillos en el aire. Pensar en las decisiones a tomar mucho antes de estar metidos de lleno en la situación, está muy bien como ejercicio de visualización para estar preparados y afrontar diferentes situaciones con agilidad, pero pensar que en el tee de 10 (par 4) tendré una salida con posibilidades de pegar fuerte el driver y acercar la bola al green para tener opciones de birdie cuando aún nos encontramos en el segundo tiro del hoyo 8 decidiendo qué palo pegar… No tiene razón de ser.
¡Pero muy señor mío, focaliza y prioriza…..!
Concéntrate en ese palo, en ese golpe, toma compromiso con él aferrándote al 100% a la decisión tomada y ejecútala. Ya habrá tiempo de analizar si la decisión fue la acertada, pero en el preciso momento que estás ejecutando la acción no puedes estar repleto de dudas planteándote que harás en una situación venidera cuando aún no tienes resuelto el acto que se encuentra frente a ti.
Si nos cuesta tomar esas decisiones, debido a las dudas para escoger el palo y el golpe a realizar, debemos tomar medidas. Que pueden ir desde entrenar más para estar más preparados y actuar con fluidez, cambiar los hábitos de entrenamiento (tal vez sean erróneos) recibir lecciones de profesionales, ya que tienen experiencia en esas situaciones, hasta sentarnos serenos en un lugar confortable y recapacitar acerca de los motivos reales que no permiten focalizar nuestra atención en realizar el golpe a golpe y hoyo a hoyo.
Por sencilla que sea la frase, de fácil compresión, implica una serie de preámbulos que bien nos merece la pena valorar para poder cumplirla al pie de la letra, ya que nos garantizará un recorrido – tanto por el campo de golf como por nuestra vida – muy placentero.
Con el tiempo y la experiencia iremos resolviendo esas dudas y seremos capaces de centrarnos y actuar con compromiso golpe a golpe y hoyo a hoyo.
Un saludo a todos, os espero en Red Social Golfista.